El colectivo ecologista Adega (tanto el de Lugo como el de A Mariña) eligió Ribadeo para celebrar el Día de la Tierra, donde reivindicó -para Galicia y para Lugo en particular- un litoral protegido de agresiones urbanísticas y de ciertas infraestructuras piscícolas o energéticas (como los parques eólicos en el mar que Medio Ambiente autorizaría instalar en la parte de la franja costera mariñana). Para efectuar esta reclamación, los ecologistas colocaron en la plaza municipal de Ribadeo un gran panel con medio centenar de fotografías ilustrativas de lo que sería un litoral bien y mal tratado. Asimismo, instalaron una urna para que las personas pudieran expresar su opinión al respecto; una iniciativa que les dejó 102 apoyos.
Por otra parte, miles de personas se manifestaron en las calles de Madrid para recordar que el planeta está en crisis, aprovechando la oportunidad, asimismo, para reclamar una actuación urgente por parte de los dirigentes en lo que respecta al cambio climático.
El Día de la Tierra también acogió un acto simbólico en la playa de Silgar, organizado por la Federación Ecoloxista Galega, en protesta por las agresiones que genera el desorden que vive el litoral gallego.
Por otra parte, miles de personas se manifestaron en las calles de Madrid para recordar que el planeta está en crisis, aprovechando la oportunidad, asimismo, para reclamar una actuación urgente por parte de los dirigentes en lo que respecta al cambio climático.
El Día de la Tierra también acogió un acto simbólico en la playa de Silgar, organizado por la Federación Ecoloxista Galega, en protesta por las agresiones que genera el desorden que vive el litoral gallego.