
La iniciativa, ‘Naturalmente Clicquot’, cuenta con una
propiedad tecnológica de gran utilidad, puesto que es perfectamente isotérmico.
De este modo, se puede guardar una botella de champagne, refrigerada
previamente, y mantenerla a la misma temperatura durante alrededor de dos
horas.
Creado por el diseñador francés Cédric Ragot, el estuche es
blanco, sólido, ligero y al mismo tiempo fácil de transportar ya que sus
formas, adecuadas a las curvas de la botella, acaban de un modo muy práctico en
un asa.