
El nuevo vino estará compuesto por una combinación de
Brancellao y Merenzao dos tipos de uva poco comunes en la zona por su poca
productividad y difícil cultivo. Aún así, el cocinero nacido en el País Vasco
ha visto en la unión de ambas un sabor que encaja perfectamente en la cocina
que propone.
Diego Guerrero viajó con su equipo a Galicia en busca de “un
vino diferente y original de alto nivel de calidad’ con la intención de hacer
que ‘el cliente viva una experiencia única en nuestro local’.