El catador y responsable editorial de la Guía Peñín, Javier Luengo, culminó una visita a la D.O. Rías Baixas para conocer de primera mano el trabajo que está desarrollando este sector. Tras visitar siete bodegas en diferentes subzonas, marchó gratamente sorprendido por la gran evolución de estos vinos sin crianza en bodega y por la apuesta del sector por el terroir o terruño en Rías Baixas. Antes las bodegas apostaban por crear una marca fuerte, ahora se busca más que el vino refleje el terruño, “me he encontrado vinos que representan una determinada parcela”, afirma gratamente sorprendido el catador.
Javier Luengo aclara que “aunque hay diferentes estilos, sí es cierto que en este trabajo hay un nexo común en busca de la calidad desde diferentes caminos”. En este sentido, destaca el trabajo de jóvenes viticultores que apuestan por experimentar con los viñedos y construir vinos que reflejan el terruño, las variedades... vinos expresivos. También comprobó cómo otras bodegas son fieles a un estilo más conservador, con vinos albariños Rías Baixas más clásicos, obtenidos a través de medios más tradicionales y que como resultado consiguen vinos con una calidad y prestigio que perduran en el tiempo.
Con este trabajo de campo desarrollado, Javier Luengo queda emplazado para dentro de unos meses, momento en el que acudirá al Pazo de Mugartegui para su cata anual para la Guía Peñín, que se publicará a finales de año.