La Denominación de Origen Rías Baixas afronta la recta final de la presente campaña de vendimia. Hasta la fecha, se han recogido 29 millones de kilos de uva en las 183 bodegas inscritas. El director técnico del Consejo Regulador, Agustín Lago, afirma que “la uva presenta un buen estado fitosanitario, con un adecuado equilibrio entre acidez y grado. La vendimia se está realizando de forma gradual y ordenada y, en principio, se están cumpliendo las previsiones del Informe de Estimación de Cosecha 2018, siempre a la espera de las condiciones meteorológicas de los próximos días”, añade.
En este sentido, Lago indica que “la mayor incertidumbre se encuentra en el volumen final, ya que esta época ha sido muy seca. La lluvia habría venido muy bien para ganar volumen e incluso para favorecer la maduración final de la uva”, concreta el director técnico del Consejo Regulador.
En cuanto a la propia campaña, Agustín Lago explica que “comenzó el 8 de septiembre, algo antes de lo previsto, dadas las altas temperaturas registradas a principios de este mes”. La recogida se inició, como viene siendo habitual, en las subzonas de O Rosal y Condado do Tea. A mayores, se vendimiaron uvas tempranas para la elaboración de espumosos en Ribeira do Ulla. Esta semana se ha generalizado en todo el territorio de la Denominación de Origen. Las primeras variedades en ser recogidas fueron las blancas y, hacia finales de esta campaña, se dará paso a las tintas.
El Consejo Regulador cuenta para esta campaña con el apoyo de 25 auditores, que se responsabilizan del seguimiento de la vendimia en las bodegas, los viñedos y los transportes. Su trabajo consiste en velar por el adecuado cumplimiento de los estándares marcados por la Norma ISO/IEC 17065 en la que el Consejo Regulador está certificado por el ENAC. Dicha normativa implica, entre otros aspectos, la certificación del origen de la uva y la trazabilidad del producto.