El alcalde prometió que no llovería. Y no llovió. La lluvia que cayó incesante sobre la ciudad de Vigo dio una tregua para el gran encendido de la iluminación Navideña, que desató la locura entre vigueses y visitantes colapsando el centro de la ciudad. Según las cifras que maneja el concello 170.000 personas se acercaron intentando atisbar el encendido en directo o a través de las pantallas gigantes que se instalaron.
Todos pendientes de Abel Caballero, con un discurso que fue el acto central... y no de decepcionó. Hubo recado para el alcalde de Madrid, al que dijo haber ganado por incomparecencia en la batalla por las mejores luces de España. También invitación en inglés para el alcalde de Nueva York para que visitase la ciudad y por supuesto palabras para los miles de vigueses congregados, que lo ovacionaron tras su ya clásico "os quiero, os quiero, os quiero".
Gran éxito por tanto que preconiza una campaña igual o superior a la del año anterior. Al gran aforo del encendido se suman datos como el lleno hotelero o el refuerzo de las líneas de transportes, que hacen prever una verdadera avalancha de visitantes para ver las "luces top" de Vigo.
A partir de ahora, suma y sigue. Este miércoles está prevista otra gran inauguración, la de la noria, que tuvo que ser pospuesta debido al mal tiempo. También se abrirá el Mercado Cíes Market, con sus casetas de objetos decorativos, gastronomía y regalos.