Con esta iniciativa se busca potenciar las plazas de abastos atendiendo a las necesidades tanto de los comerciantes como de las personas consumidoras. Así, entre los principales objetivos se encuentran aprovechar la situación estratégica de los mercados y potenciar estos espacios como el mejor escaparate del producto gallego de calidad, vinculándolos al entorno en el que se integran, al producto local y a valores como la sostenibilidad, la protección del medio ambiente y el trato personalizado. Del mismo modo, se apuesta por mejorar su accesibilidad, conseguir su modernización y digitalización e incrementar los servicios que se prestan a la clientela.
En el caso de los ayuntamientos, los apoyos se centran en la mejora de las instalaciones, de los servicios para la clientela, la equipación comercial y la eficiencia energética. Las ayudas llegan hasta el 80 % de la inversión subvencionable, dependiendo del tipo de actuación a desarrollar.